martes, diciembre 23, 2008

Lo bueno de tener un blog es que uno (mááás o menos) puede intentar recordar en qué estaba pensando o cómo andaba en x temporada, tan facilito como buscar en el historial (ó bueno, tal vez otras personas sin tener blog puedan hacerlo, pero yo no porque tengo pésima memoria).

A lo que voy es que me estaba preguntando qué era lo que yo esperaba hacer este año; porque a juzgar por lo que se hizo, suponía que me había propuesto metas muy académicas... porque efectivamente, resultó ser un año de mucha productividad y no tanta diversión. Digo digo, no es que haya sido totalmente aburrido, pero sí estuvo todo muy ñoño.

Y no. Mis expectativas del 2007 sí se cumplieron bastante bien, no recuerdo si en el 2007 pero ya se cumplieron, que es lo que cuenta :P

No lo recordaba, pero empezando el 2008 estaba era como en la inmunda. Me arrancó una sonrisa que pues sí, aunque fue un año de muchos altibajos piscológicos, me siento mucho mejor :)

Así que más o menos sí se cumplieron los objetivos. Prueba superada.

Sobre el 2009, mi objetivo es divertirme; pero no sólo disfrutar del trabajo (porque ya lo hago), sino simplemente diversión por diversión, ¡dejar la ñoñez!

Además de eso, como ya lo dije: no me quiero proponer nada.

Mi propósito de año nuevo es no proponerme ni mierda, sino hacerlo.


Y el resto no lo digo, porque ya lo pedí el día de las velitas y si lo digo, no se me cumple ;)


feliz navidad y año nuevo :)

lunes, diciembre 08, 2008

quejetas

Admito que me he excusado en su patetismo para minimizar el mío, cuando en realidad soy yo la que no ha continuado con su vida y sigo como en stand by, esperando a que las cosas se hagan solas mágicamente.
(y cuando me dé cuenta no sólo de que ya lo hizo, sino de que además me ganó; ahí sí que me voy a sentir re-paila.)


Debo dejar esa maldita manía mía de comparar y autoexcusarme; sin mencionar que excusarse con uno mismo es tan estúpido como creer que logró tapar el sol con un dedo sólo porque uno solito no lo ve. Aru, doh!


Estoy aburrida de sermonearme cada vez que salgo de mi casa o me dispongo a hacer cualquier cosa normalísima de la vida; yo sé que estoy subestimando (…en proporciones épicas) mis capacidades y mi cordura, pero cuando llega el momento lo vueeeelvo a hacer.


Básicamente estoy aburrida de mi misma. Quisiera decir que anhelo unas vacaciones de la universidad, de la gente, de mi familia, ó de lo que sea... cuando en realidad necesito desesperadamente unas vacaciones de mí misma; el problema es, ¿cómo carajos hace uno eso?, ¿hay algún sitio donde vendan pasajes que lo lleven a uno lejos de uno mismo?


Iba a terminar esto en la frase anterior cuando me di cuenta de una cosa: todo esto suena como a que me estoy formulando mis propósitos de año nuevo...

¡NO!

Estoy mamada de ser tan morsamente propositiva.

Lo último que necesito en la vida es proponerme maricadas que hacer. Lo que realmente necesito es empezar a ejecutar sin proponérmelo, no racionalizar cada puto paso que doy, ¡necesito ser espontánea!*

*Cualquiera que me conozca superficialmente creería que soy espontánea y no, lo que soy es impulsiva, y eso no tiene nada que ver con espontaneidad.


Juraría que con esto encontré el punto de partida que estaba buscando, que lo que necesito es ser espontánea; pero en realidad es absurdo desde su concepto general porque es imposible proponerse ser espontáneo, ya que el “propósito” mata instantáneamente a la espontaneidad... ¿no?

o sea, en conclusión: marikkk, ¿qué putas hago?! xD

jueves, octubre 30, 2008

no tan breves

Hace unos días él me decía cuán perfecta era su vida, lo increíblemente feliz que era, y yo lo cuasihijueputié, sin ningún motivo.
Hoy me cogió de un buen humor excepcional y me cuasihijueputeó sin motivo. Después se quejó de su vida hasta que se tuvo que ir.

Caray, ¡cómo extrañaba esto! :)
Antes tenía muchos amigos locos; no sé a qué horas se fueron todos a luchar contra sus molinos y me quedé yo acá, atrapada entre tanta cordura. Qué aburrimiento.

Digo, no es que con ellos se hagan cosas extrañas o sea ultradivertido; es el simple hecho de poder saltar, gritar, putear, reír, llorar,... de poder expresarse libremente sin que lo miren a uno despectiva o lastimeramente, sin tener que dar explicaciones. Es igualmente el sentirse identificado cuando ellos lo hacen.

Me pudre sobremanera tener que aparentar equilibrio a toda hora, así sepa que nadie se lo cree. Me pudre tener que escuchar sus opiniones “cuerdas” sobre la gente que creen “loca”. Me pudre putamente tener que aguantarme conversaciones estúpidas de gente que cree que sólo los emos se deprimen, y que afirman que nunca se han deprimido en su vida.

Y me parece increíble, además.
¿En serio la gente que se precia de “normal” tiene una gama de sentimientos tan estrecha, o será que se empeñan tanto tanto en dejarnos ver solamente los intervalos bonitos y socialmente aceptados?
Si así es, tendrán una voluntad de hierro, porque yo ya estoy aburridísima de jugar a eso. Y se me nota.


---------------


Con esto ya podría decirse que mis palabras son uno de mis platos favoritos, pero qué changos, me las como con mucho gusto.

Después de darle muchas vueltas al asunto, he concluido que tengo que dejar de ser tan cobarde. Punto.
Después de todo, he llegado a pasar temporadas en las que mataría por un sentimiento que me sacudiera, así fuera ira, tristeza, lo que fuera... y nada, no llega.
Ahora por fin tengo un sentimiento, y que además es bonito, y me llena,... pero me cohíbo porque no va dirigido a una persona que cumpla con mis “estándares”, porque racionalmente no tiene sentido, porque hasta me daría pena admitirlo :P
Pero, ¿saben qué?, ¡qué changos!
Ya no me voy a cohibir; voy a vivirlo en toda su extensión, así no tenga sentido y me de paranoia.
Al final, lo más terrible que me podría pasar sería terminar cantando millones de veces siiii no se pudo pues no se pudo ♪♫, lo que en realidad no es peor que terminar con un novio porque hace muchísimo no sentías ni cosquillas pero ni él se había atrevido a afrontarlo ni tú a sostenerlo...

...así que pues, ante eso, realmente no tengo nada que perder.
Igual y, como dice más adelante la canción:
por mucho que duela, se acabará
siempre que llueva te mojará
y aunque te empape, se secará
se secará.

viernes, septiembre 19, 2008

breves

Anoche me soñé que me independizaba de mi querida y paciente familia.

Llegué al sitio y resultó ser un edificio de mierda a punto de caerse, aún así yo estaba feliz.
Por dentro se parecía al colegio de Silent Hill (el juego), pero en la versión pailas; aún así yo estaba feliz.
Cuando llegué al apartamento resultó que tenía de roomate a una niña que no conozco pero de la que he escuchado precisamente por ser una terrible roomate, aún así yo estaba feliz.
Cuando terminé de inspeccionar el mal estado en que estaba todo y la pésima seguridad industrial que tenía el edificio (razón por la cual estaba casi deshabitado), me senté a descansar, pensando en lo lindo que era tener mi propio sitio y en lo feliz que estaba... de repente salió de la nada el vecino de arriba, con un arma, persiguiéndome para dispararme.

Me pregunto cómo hptas debería interpretar ese sueño... ¡¿?!
jejejejjeje

---

Terminé con D*, ahora sí deveritas, deveritas. Por fin, ya tenía la sensación de que iba a terminar casándome con él a punta de cobardía.

Ahora entiendo qué es lo que no funcionaba entre nosotros.
Él tiene una perspectiva muy clara y hace hojas de excel para planear sus metas... en cambio yo soy una enredada , complicada y azarosa.

Es claro que voy a estar toda la vida ahogándome en vasos de agua ocasionalmente, porque así soy, porque no creo que logre cambiar... así que si voy a estar con una persona por mucho tiempo, como mínimo tendría que ser alguien que con toda naturalidad me acompañe a hacerle mantenimiento a mi vaso, a comprar el traje de baño... alguien que sin extrañarse me pregunte, ¿qué tal estaba el agua?, ¿te acordaste de usar bloqueador?

---

Después de azotarme y deprimirme por todas las cosas que dejé tiradas y para las que ya me sentía muy vieja para reanudar... súper casualmente y sin tenerlo premeditado, terminé retomando dos de esas cosas recientemente.

No es que sean las más significativas, pero al menos... y sé que es algo que no hubiera hecho ni por propósito de año nuevo :P

---

Ya se acabaron las vacas, turú.

viernes, septiembre 05, 2008

Movistar dice la verdad entre líneas

Esto es una página de publicidad de Movistar que venía con el perdiódico:

A simple vista no hay nada extraño, es una publicidad normal. Pero cuando se pasa la página, que curiosamente diferente a como funcionan las demás hojas de periódico, se pasa abriendo la página hacia afuera, entonces, ¿qué ocurre?



mmmmmm, momeeeento, algo parece diferente... veámos de nuevo:


Parece que cuando Movistar les dijo a los publicistas que querían proyectar una imagen honesta y sincera, a lo mejor ellos no entiendieron exactamente a qué se referían :P

viernes, agosto 22, 2008

Cosas que sólo me pasan a mí

Hace mucho no hacía una de estas crónicas de mi mala suerte pero es que el caso realmente lo amerita, y además, me estoy tomando un tinto que no se va a charlar solo :P

La cosa empezó desde el lunes en la noche que estaba haciendo un trabajillo que tenía que entregar el martes en la mañana (el último para acabar la materia), lo terminé, lo puse a imprimir, y preciso a la impresora agarrando la última hojita le dio por dañarse insólita y aparatosamente... después de varios intentos fallidos me resigné y me dispuse a guardar sólo la última hoja, en .pdf (para evitar que las ecuaciones se pixelaran con el cambio de versión...). En ese momento descubrí que Word cuando exporta el archivo, muuuy amablemente le hace a uno el favor de guardar de paso el original, total que perdí el resto del trabajo (y sin posibilidad de Ctrl+z); pero bueno, habiendo superado el mal genio de la impresora ya eso no me importó, nada más vi el trabajo en su pastica y pensé, “bueno, esta es la ÚNICA copia, ¡voy a entregarlo YA!”. Y fui a la universidad, pero no me encontré al profesor y como tenía tanto que hacer, decidí botárselo por debajo de la puerta de su oficina, total que ya lo había hecho con un trabajo anterior y todo había salido bien; entonces lo hice (me costó un poco de trabajo porque la puerta estaba como descolgadita ella) y me fui.

Jueves en la tarde, voy a entregar otro trabajo final de otra materia y por casualidad me encuentro al susodicho profesor, entonces aprovecho y le pregunto si había encontrado mi trabajo y cuándo publicaba notas, él me dice que no tenía mi trabajo, yo me extraño y de paso le pregunto,
Yo: profe, y eso, ¿qué hace en esta oficina?
Él: esta es mi oficina
Yo: ¿cómo así?, si yo eché el trabajo por la puerta de otra oficina o_O
Él: hmm, pailas.
Yo: pe, pero, yo ya le había dejado otro trabajo debajo de ESA puerta
Él: ¿y cómo sabe que ese sí me llegó?
Yo: porque ya me lo entregó calificado
Él: mmm tal vez me lo dejaron en la escuela. Ah, por cierto, hoy paso notas.
Yo: uy, entonces voy a ver si lo consigo o lo vuelvo a imprimir y ya se lo traigo.

Salgo y me asomo a la oficina impostora y efectivamente ahí está mi trabajo, aún junto a la puerta, y la oficina tiene cara de no haber sido visitada recientemente.
Intento sacarlo con algo y accidentalmente lo empujo más, entonces me acordé que había sido difícil meterlo así que no perdí más mi tiempo (porque tenía afán) y me fui a imprimirlo de nuevo.
Cuando llegó mi turno y no lo encontraba en la USB, entonces tuve el fatídico flashback, mirando el trabajo en su pastica... ¡esa era la ÚNICA copia, la que está detrás de esa puerta! O_O

Subí de nuevo y me tiré al suelo a meter por debajo de esa puerta todo lo que tenía en el bolso, posteriormente todo elemento oblongo que me encontré en la basura... hasta que llegó un profesor que se apiadó de verme tirada rodeada de cosas y basura y se ofreció a darme el teléfono de la dueña de la oficina. La llamé, le expliqué como por media hora y ella me decía...
Ella: estás equivocada, no sé quién eres...
Yo: ¿Edna?
Ella: sí
Yo: es que usted no me conoce, yo soy una estudiante torpe de diseño que echó un trabajo por debajo de su puerta,...
-horas después-
Ella: hmm ya te entiendo, pero creo que no voy a poder ayudarte; yo sí soy Edna, pero no soy profesora de diseño.
Yo: ¬_¬
Profesor que me dio el teléfono: ups, si esa era otra entonces no, no tengo el teléfono de ella.

Entonces me puse a buscar por todos los rincones polvorientos del edificio alguna vaina que pudiera meter debajo de esa puerta del demonio... alguien me dio la idea de ir a talleres y se ofreció a asomarse por la ventana de la oficina y ser mis ojos.

En este punto estaba muy preocupada porque tenía que ir a cortar con láser unas vainas y me iban a cerrar, y necesitaba ese material cortado para ponerme a trabajar... entonces me fui corriendo como una loca por la universidad y volví con una manotada de palos y palitos... fui a la oficina y casi ningún palo pasaba por debajo de la puerta... por fin uno entró, mis ojos prestados me dijeron que estaba cerca, que más a la izquierda, que ya lo estaba empujando, que iba muy cerca, muy muy cerca, que ya debía estar a punto de asomarse el trabajo por la puerta... entonces el palito se partió.
Yo quedé pasmada.
Seguí pasmada.
No me pasaba lo pasmada.

Entonces ella empujó la puerta, que se movió un poco, dejando asomada una gloriosa esquinita de plástico...

Salí corriendo a entregar el trabajo que había quedado todo mugrosito, el profesor me miró como un culo mientras trataba de sacudirle la mugre a la pastica trajeada...

Finalmente me fui corriendo nuevamente como una loca a lo del láser, ¡por fin!

Cuando llegué al sitio, habían quitado el local de ahí.

martes, agosto 12, 2008

¿por qué se empeñan en robarnos?

Anteriormente tuve varias impresoras HP, pero me caían mal por varios motivos:

1. Una vez nos salió una impresora defectuosa. Mi hermana envió una queja a HP cuando estaba en la universidad y años después, cuando mi hermana ya estaba casada y con hijos, recibí una llamada de alguien con acento chistoso que me hablaba de una impresora defectuosa... cinco minutos después... diez minutos después... ¡aaaahhhh!
Cuando por fin entendí de qué me estaba hablando le dije que esa impresora la habíamos botado hace años, y me dice el señor con acento chistoso: ¿entonces no deseas continuar con el reclamo?, ¿estás segura?

2. Me sacaba la piedra sobremanera que los cartuchos costaran casi el 50% del valor de la impresora, ¡ni que la tinta fuera más cara que la gasolina hey!

3. Me sacaba la piedra sobremanera que a los cartuchos de color se les acababa la vida útil cuando se acababa un color, así quedara un montón de los otros dos.

4. Usualmente rellenaba los cartuchos acabados, pero me sacaba también la piedra que la calidad era muy muy muy inferior, y que si no se usaban con mucha frecuencia se despapayaban.

Por eso después de varias HPs (muy bien puesto el nombre sí está, para qué) me decidí por una Epson, por el fino detalle de coquetería de que los cartuchos son muchísimo más baratos y que su vida útil (teórica) va hasta que la tinta se acaba, como debería ser. Bueno, por eso y porque estaba antojada de ponerle sistema de tinta continua, antes de saber que era tan caro :P

Cuando la compré me hicieron la advertencia de que los cartuchos que traía duraban menos, ahí yo: ¬_¬
Leí en las instrucciones y efectivamente ahí decía que los cartuchos que traía la impresora nueva por no sé qué tortoladas técnicas no podían durar lo mismo que los demás (ajá, sí, y los usuarios nacimos ayer...).



Total que cuando el cartucho se acabó y me disponía a botarlo me percaté de que decía que no le quitara la etiqueta por nada del mundo, así que, por supuesto, intenté quitarle la etiqueta. Como no fui capaz de quitar la etiqueta :P, lo abrí y descubrí a través del plástico transparente que traía que el cartucho estaba dividido en muchas celdas; me sorprendió ver que había un par de celdas que aún estaban llenas (cuando según la impresora el cartucho estaba acabado acabadísimo no va más señores) y otras que estaban y siempre estuvieron vacías... me imaginé que tal vez esas eran de la clase de tortoladas técnicas que impedían absolutamente que el cartucho durara más, así que decidí que cuando se acabara el cartucho nuevo lo iba a abrir a ver si era diferente al anterior.


Ya se acabó el cartucho y cuando lo abrí, me sorprendió mucho que esta vez el plástico transparente que vi en el anterior estaba cubierto por otro plástico, pero negro... hhhmmmmmm...




Igual estaba decidida a comprobar si era diferente, así que quité el plástico negro, y donde no quitaba lo corté, y estos fueron los resultados:

Esos espacios vacíos no tienen PARA NADA cara de ser funcionales, y encima una de las celdas aún está totalmente llena.

Total que, ¡Epson no es menos HP que HP!
No entiendo por qué las empresas que producen impresoras y tintas se empeñan tanto pero tanto en robarnos, ala.
Dudo mucho que el volumen de las celdas vacías, si las llenaran, hicieran gran diferencia de precio, con respecto al costo de producir el cartucho como tal.
A estas horas de la vida y de la contaminación me parece el colmo con los usuarios y sobre todo con el medio ambiente, que no se esmeren más en ser eficientes. Al menos deberían tener la decencia de asegurarse de reciclar ellos mismos su porquería de cartuchos e impresoras!!!

Si al menos alguna marca se atreviera a producir cartuchos transparentes y sin etiquetas que prevengan a los usuarios de verificar lo que compran, así fueran más caros, yo me caso, ¡lo juro!
Por venderme impresoras, tinta y honestidad.

martes, julio 29, 2008

La gente tiende a pensar piensa que los estudiantes de universidades públicas somos revoltosos.

En realidad lo son un porcentaje muy pequeño, sólo que hacen mucha bulla: hacen bulla por ellos y por nosotros, a los que no nos interesa su causa de turno. Y es más, además de ser un porcentaje pequeño no suelen tener la saludable costumbre de algún día graduarse... así que sumen, resten, dividan... son apenas un par de pelagatos y renuevan personal cada diez años.

Yo cuando estaba en el colegio (femenino, católico, de monjas) era revoltosa. Pues obviamente, entre lo revoltoso que puede ser un adolescente, es decir, con muchas ganas, más bien pocos conocimientos al respecto, y unas profundas y sólidas convicciones... de dos semanas.

Desde que leí el diario del Che mis lemas eran cosas como “para no luchar habrá siempre sobrados pretextos en todas las épocas y en todas las circunstancias, pero será el único camino de no obtener jamás la libertad.”, “nuestra acción es un grito de guerra contra el imperialismo...” y bobadas por el estilo... y por supuesto, también tenía una camiseta del Che aunque pareciera prestada (porque las ideologías vienen en stretch, en cambio las camisetas sólo las vendían en tallas grandes).
En mi pico de “revoltosidad” mi sueño era morir luchando por una causa justa (pues no con armas, aunque en realidad nunca llegué a definir cuál causa ni por qué changos me tenía que morir); me encantaba la música de protesta, discutir con la profesora de Ciencias Políticas, y si me ponían a hacer un ensayo yo hacía una oda al comunismo (o a lo que creía que era).

No siempre con tanta bobada junta, pero fui revoltosa aproximadamente todo el bachillerato.

Y vean ustedes, yo que entro a la universidad y, ¡santo remedio!

domingo, julio 20, 2008

Intersecciones

El hombre atraviesa el presente con los ojos vendados. Sólo puede intuir y adivinar lo que de verdad está viviendo. Y después, cuando le quitan la venda de los ojos, puede mirar al pasado y comprobar qué es lo que ha vivido y cuál era su sentido.

Milan Kundera, El libro de los amores ridículos.



Es curioso cómo las cosas, las personas, incluso los animales, pasan por la vida de uno tan casualmente, que ninguno de los implicados se percate de las consecuencias de la situación. Cuando se trata de que el camino de alguien(es) se cruce con el propio por un tiempo prolongado, usualmente salta a la vista la influencia de la intersección... pero, ¿cómo medir la influencia que ejerce en la vida de uno y otro cuando se trata de un fugaz cruce de caminos?; más aún, ¿cómo medir la influencia de situaciones fortuitas que pasan desapercibidas?

Hace un mes, con la excusa de mi proyecto académico gatuno, convencí a mi mamá de dejarme tener un gato para efectos del proyecto, o eso le dije yo, aunque siempre tuve las negras intenciones de que adoptáramos permanentemente un gato; en ese punto mi camino se cruzó con el de una gatita hermosa, aunque no fue exactamente el punto de partida. Hacía una semana y media atrás había llegado a la casa de una amiga una gatita mirringa y flaca. Mi amiga que sabe lo catlover que soy me vendió la idea de adoptarla con publicidad engañosa, ya que en su casa estaban que la echaban porque no tenían espacio para otro gato.


Mi plan malvado se basaba en que la gatita enamorara a todos mientras yo me encargaba de la absoluta limpieza del asunto. El plan iba funcionando bien hasta un fin de semana que me fui de paseo mientras la gata, entre otras cosas poco gratas, se hizo pupú en la cama de mi mamá, no una sino dos veces (una en la almohada, para más piedra). En ese momento la gatita compró su tiquete de salida de la casa, sólo que no la echaron de una vez porque aún no teníamos un hogar sustituto.

Entre las primeras cosas que hice cuando Cleo llegó fue llevarla a desparasitar. Como mi trabajo era limpiar casi obsesivamente su caja de arena y los deslices que tuviera, eso me llevó a estar a toda hora pendiente de las heces de Cleo y así fue como me fui dando cuenta que estaba enferma, así nadie me creyera porque se la viera activa y alegre. Que mi mamá la quisiera tanto me dio tiempo para que mi paranoia me hiciera llevarla al veterinario otras dos veces, hasta que descubrieron que Cleo (pese a la primera desparasitada), tenía unos parásitos ni los hptas, que la estaban matando.

Empezamos el tratamiento al tiempo que le encontramos un buen hogar sustituto; pensamos en mandarla de una pero las drogas la tenían muy malita y como todos estábamos tan encariñados con ella, decidimos tenerla hasta que terminara el tratamiento y se pusiera mejorcita.

Ya estaba tomada la decisión, pero ayer amaneció más cansona e increíblemente cagona. Se hizo varias veces en mi cama y pantalón, en la cama de mi mamá, en un sofá, se me hizo toda encima... y con tan mala suerte que todos también estábamos teniendo un día de mierda respectivamente, así que se decidió que la gatita se fuera ipso facto a otro hogar temporal, para que al día siguiente la transportaran a su hogar definitivo.

Cleo es una “person cat”, siempre tiene que estar al ladito de donde está la gente. Anoche estaba hablando con mi mamá en el cuarto de ella, estábamos las dos solas... de repente ella se sentó en la cama, y yo me senté, y por una mala concentración de esfuerzos la tabla lateral se rajó y toda la cama se vino abajo. Varias veces que estaba con mi mamá en su cuarto, Cleo se quedaba todo el tiempo con nosotras, casi todo el tiempo (más de un 80% diría yo) corriendo como loquita debajo de la cama.

Ya que éramos las únicas en la casa, si Cleo no se hubiera ido ese día, muy muy probablemente habría estado debajo de la cama en el momento que se cayó.


Fue entonces cuando supe que mi papel en la vida de Cleo había terminado, que ese era el punto donde nuestros caminos se separaraban y así tenía que ser.

Si en el futuro nos recordara, posiblemente nos recuerde como el sitio donde la torturaban dándole cosas horribles en jeringas, inconsciente de la influencia que tuvimos en su vida, inconsciente de que nos dejó a todos un huequito en el corazón, (hasta a mi mamá odiagatos).

Por mi parte la recordaré saltando como loquita, cómo lo miraba a uno a los ojos y se estiraba a tocarle la cara con sus manitas alcolchonadas, mis piernas calientitas... y recordaré que me dejó con ganas de muchas más influencias fugaces.

Y obvio, también recordaré lo linda que es :)




Desde que me dio el existencialismo crónico me la paso pensando en que empleamos un porcentaje muy grande de nuestra vida preparando cosas que ni siquiera tenemos certeza de llegar a vivir; largos estudios profesionales, trabajos esclavizantes... sin saber si nos alcanzará la vida para graduarnos, o para detenernos a descansar y disfrutar... aún quiero mi carrera, no es que tenga crisis vocacional, pero ahora dudo seriamente de su importancia real.

Hace mucho he tenido la intención de entrar a una asociación que rescata animalitos, pero no lo he hecho por falta de tiempo o por tener lleno el cupo de actividades extracurriculares... ahora creo que es el momento de dejar pasar otras vainas y darle tiempo a esto.

Estoy cansada de las cosas largas y preparadas... necesito aprovechar más de lo efímero.



Y ahora que ando de recordona, algunos de los otros gatitos cuyos caminos cruzaron, brevemente, por acá ^_^

sábado, junio 28, 2008

Respuestas en diferido.

Ahora sé que no era culpa de la regresión, la regresión era prácticamente una señal, una pista para encontrar el tesoro...

En todo ese ánimo regresivo, me dio por postear en mi viejo blog, el más viejo de todos: mi blog de cien hojas cuadriculadas, que aunque lo tenía abandonado, aún sigue absolutamente impregnado de mi... con cositas pegadas con cinta, untado –literalmente- de sangre cuando aquellas épocas autodestructivas, con su inicio cursi y obvio que posteriormente me parecían estupideces, pero que ahora que lo leo va tan lejos, dice cosas tan profundas sobre mí (aplicadas a cualquier época) sólo que con las ingenuas palabras de una mocosa de 14...

Yo desesperadamente buscando respuestas,... para darme cuenta al abrir ese viejo cuaderno destartalado, que todas, todas, las dudas que tenía, tienen sus respectivas respuestas ahí, entre esas hojas, respuestas escritas por mí misma.

Mi viejo blog me dio todas las respuestas que necesitaba.

Algunas eran de esas respuestas que en el fondo uno sabe que son las correctas, pero que resultan tan difíciles de ejecutar que uno se niega a considerarlas; sin embargo, también me dio un consejo al respecto:
Gracias por la leve despedida, ojalá más despedidas fueran así: espontaneas, cálidas pero no empalagosas, sin ese aire de “último momento”.
Gracias por venir... y por irte.

Sobre mi queja acerca de que otra vez vivía enmimismada, que nuevamente estaba sintiendo esa gran brecha Aru-Humanidad que parecía inviolable... encontré una respuesta increíblemente tan directa, que junto con todas las demás, hasta parecían una broma... encontré respuestas que parecían haber sido escritas con esa intención, como si, por un instante, hubiese sabido que años después iba a estar confundida y abrir ese cuaderno, y encontrar justamente todo lo que necesitaba escuchar:

Resistiéndome a ello, siempre anhelé de alguna manera comunicarme con el mundo; lo malo fue que cuando al fin lo logré olvidé cómo comunicarme conmigo.

Viendo ese cuaderno desde lo primero hasta lo último, me doy cuenta que no existen "yoes pasadas" porque en realidad nunca he cambiado, así sea con diferente pinta y con diferente peinado pero siempre he sido la misma; y así sea con diferentes palabras y trazos sutilmente cambiantes, siempre he dicho lo mismo, porque siempre ha sido la misma historia.

Había dejado mi cuadernito tirado después que se me quitaron los delirios de escritora, y había ido dejando el blog tirado porque pensaba que ya no tenía nada importante qué decir, y lo que tenía por evacuar del sistema ya me daba pena escribirlo acá de ver lo pesado y quejumbroso que se estaba volviendo el blog... pero ahora que lo pienso, salvo un par de cortísimos lapsos de ambos (el digital y el “análogo”), siempre he escrito únicamente para mí, no para otros.

Es obvio que lo que escribo de valor literario no tiene ni un peso, pero no por eso debo dejarlo... quiero recobrar esa vieja costumbre de no perder oportunidad de dejarme mensajitos, o de contarme historias que inevitablemente olvidaré.

Que por cierto, atendiendo a un viejo consejo que me dejé, debo leer nuevamente Por quién doblan las campanas; ya casi ni lo recuerdo pero parece que me gustó mucho :P


Ah, y una última cosa que definitivamente quiero recordar:

martes, junio 24, 2008

Error deshaciendo restauración del sistema a un estado anterior!

Hace días tenía muchas ganas de escribir algo, incluso desarrollé varios posts en mi cabeza y hasta me los comenté y me los respondí; pero al final se me quitaban las ganas de escribirlos.

Últimamente siento que la vida me ha empujado para atrás, en muchos aspectos. Yo no sé cómo hacía cuando era más joven, tenía mil ocupaciones pesadísimas, dormía cuatro horas al día de lunes a sábado, tenía fluctuaciones emocionales bastísimas, y aún así todo mantenía su delicado equilibrio, y funcionaba. Luego tenía menos ocupaciones (aunque más complicadas, sí), todas ellas predominantemente sedentarias, mis emociones no fluctúan tanto como antes (no bajan tanto, aunque lamentablemente eso incluya que no lleguen tampoco a lo más divertido), y cuando duermo cuatro horas me la paso todo el día diciendo idioteces (más) y estrellándome contra las paredes... no tengo la menor idea de cómo hacía antes para mantener ese ritmo de vida a toda hora, me imagino que es envejecer, que llaman.

A lo que voy es que, como decía más arriba, la vida me está empujando a como era antes, así el físico diga que ya no estoy para esos trotes, la vida hace caso omiso y sigue con sus caprichosas regresiones...
Y eso no es todo, la exigencia y el ritmo me intentan arrastrar a un par de años atrás, pero en otros aspectos me arrastra hasta mucho más atrás!!
Últimamente me siento, no sé, como me sentía cuando estaba en el colegio... no hace mucho creía que los años no habían pasado en vano, que evidentemente ahora, ya plenamente en el segundo piso, ahora sí la tenía más clara... y resultó que no, que me siento tan desorientada como cuando tenía 13 años (no sé si será algo con los múltiplos del tres o qué...), o hasta más... o sea, ¿cómo decirlo mejor?, que me siento como una teenager con demencia senil.

Incluso socialmente; siempre he tenido la tendencia a “enmimismarme “, aunque hace bastante había logrado civilzarme tantico, volverme más sociable... pero últimamente se me antoja más el enmimismamiento que la sociabilidad, tengo un montón de cosas que contarme a mi misma que nunca se nos agotan los temas de conversación, en cambio tengo más bien poco que decirle a otras personas; incluido él, a él lo siento de una forma extrañamente tan lejana que con frecuencia juraría que no existe, que su recuerdo es como algo que alguna vez leí en algún libro, o algo que vi en TV... a él sí que no se me antoja decirle ni mu. No sé.
Y eso incluye que me da la impresión, como entonces, que la gente cree que estoy loca (la impresión y un par de testimonios anónimos en Facebook, para ser más exacta ¬_¬)...

En resumen, que me siento como una especie de limbo a-temporal donde mi comportamiento es una extraña mezcla de yos pasadas, donde la realidad tiende a confundirse con la imaginación y con el recuerdo… increíblemente hasta tengo esa extraña sensación que tenía en una época de mi infancia cuando tenía alguna especie de delirio Truman Show, que pensaba que mi vida era una película que veía proyectada en un cine medio vacío, junto a personas que morían de vejez ahí sentadas en sus puestos, viendo la película; esa sensación de que la “realidad” me parece como tan... irreal.

Y por si fuera poco, las próximas semanas pintan con aún más regresiones, con él viniendo, y yo teniendo que retomar esos trabajos agotadores que pensé que no iba a tener que hacer nunca más... cuándo irá a terminar toda esta rareza de por dios…?

jueves, junio 12, 2008

eternofobia

De niña nunca fui “miedosa”; entre mi hermana y primos mayores, yo era la encargada de avisar cuando pasaba lo feo de las películas de terror para que se destaparan los ojos (...y lo divertido que era avisar antes de tiempo! :P jejeje), la encargada de ir a mirar cuando había ruidos extraños, de apagar la luz y volver a oscuras, de acompañar al baño cuando tenían miedo... ese género de cosas paranormales nunca me asustó mucho, en cambio la estúpida idea de la eternidad era lo que me hacía mojar los pantalones, y lo que hasta el sol de hoy me da un miedo espantoso.

Toda la vida me ha atormentado el existencialismo. Cuando era niña, con cierta frecuencia llegaba llorando a donde mi mamá porque me angustiaba la duda de que si después de morir se extinguía nuestro pensamiento y perdíamos todo lo que habíamos vivido y se venía una eternidad de nada, o si continuaba una eternidad de algo,... no era como tal que le tuviera miedo a la muerte (porque también me daba miedo pensar que la vida fuese interminable), básicamente me daba miedo el concepto general de “eternidad”.
Mi mamá que no hallaba qué decirme, alternaba sus respuestas entre que me iba a ir al cielo, que iba a reencarnar en algo lindo como una flor o un conejito, o que ya dejara de joder (yo creo que mi mamá, con todo y lo puritana que es, hubiera preferido toda la vida que le hiciera preguntas incómodas sobre sexualidad jejejjeje).
Ni les quiero contar lo insoportable que me volví cuando a los seis años, un día que estaba sola en la casa llegaron unos testigos de Jehová y me preguntaron si sabía el nombre de Dios, y que si no sabía cómo se llamaba me iba a ir al infierno... desde ahí pueden imaginarse la cruzada personal que emprendí de perseguir a mi mamá con el volantico que me dieron, con la idea de que si no íbamos a la iglesia esa nos íbamos a pudrir todos en el infierno…

Con el tiempo preferí dejar de pensar en eso hasta que, tendría como 13 o 14 años cuando alguien me preguntó a qué le tenía miedo, y en ponerme a explicarlo me puse a chillar vergonzosamente como cuando era chiquita... desde ahí decidí que tenía que clausurar ese tema para siempre, borrar esa palabra horrible de mi vocabulario.
Me imagino que por eso inventaron la religión, para evitar andar pensando idioteces decidieron estandarizar una sola.

Desde ahí todo estuvo bien por un tiempo largo, hasta que, años después, volvió el maldito existencialismo a atacarme, primero en las noches de insomnio, luego en los comerciales, en el baño... hasta que empezó a visitarme súbitamente con mucha más frecuencia, en los trayectos de bus, en cualquier pausa corta, y siempre con su usual característica ya no de hacerme llegar llorando a donde mi mamá, pero sí de cagarme el día, la semana, o hasta el mes, poniéndome a pensar en lo inútil que es lo que uno hace en la vida ante la idea de la eternidad y la certeza de morir... y sí, es tan estúpido como suena, ¡¡¡pero es estúpidamente inevitable!!!

Por eso me decidí a escribir sobre esto, ¡porque me tiene podrida esa fobia tan marica!
Porque clausurar ese tema no me ha servido pa’ ni mierda así que me imagino que la única solución es tocarlo, como identificar las cosas falsas en las películas de terror, como descubrir que las arañas además de pequeñas son muy frágiles, como hacerse curación en una herida así duela, como salir a verificar que los ruidos eran un vestido colgado que el viento azotaba contra la pared.

domingo, junio 08, 2008

otro más

Esto es una breve continuación a uno de mis primeros posts, de mi primer blog -QEPD-...

Sabes que eres diseñador cuando (la cadena, más algunos aportes míos)

.
.
.

x. Las mamás son un fastidio en las labores de muchos pasos sucesivos.
Trabajando en algún proyecto, termina uno de hacer los planos y ellas brincan amocionadas: "¡quééééé lindo te quedó el trabajo!", y uno "mamá, esto no es el trabajo, ya quisiera..."
Termina uno el molde y ellas brincan: "ahora sí, ¡qué bonito que te quedó el trabajo!"...
Termina uno el contra-molde y ellas: "ufff, ¡qué trabajo tan lindo!"
Termina uno de cortar las piezas y ellas: "no, ¡te quedó divino el trabajo!"...

...hasta que por fin después de muchos pasos y días sin dormir llega uno feliz porque por fin terminó el dichoso trabajo, ahora sí en serio; entonces llega la mamá y mira al trabajo, lo mira a uno, y dice: "hmmm, y qué más, ¿cómo te ha ido con cálculo?"

-_-U

jueves, mayo 08, 2008

Recuerdo perdido recuperado

La simple actividad de tener que coser unos muñequitos cojincitos me trae un dejá vù fuertototote de cosas que parecían borradas del disco duro.

Una navidad cuando éramos pequeñas, estábamos en un curso vacacional (clásico recurso para deshacerse de los niños en vacaciones) donde nos pusieron a coser animalitos rellenos de algodón con tela de navidad; razón por la cual ese año y algunos otros que lo sucedieron nuestro árbol estuvo decorado con cojincitos de formas abstractas (no me acordaba de esos cositos pero ni remotamtente...). Una noche de esas estábamos cosiendo animalitos llegó mi papá de alguno de sus viajes, estaba estacionando el carro cuando salí corriendo al parqueadero con un cojincito abstracto en la mano y llegué gritando “¡papá papá, te regalo un conejito!”, y él responde “yo también te regalo un conejito”, y efectivamente saca un conejito, de los de adeveritas, blanquito de orejas negras, con una mancha negra en la espalda y colita esponjada. Orejín, lo llamamos.

martes, marzo 25, 2008

Recientemente, desde hace una semana hasta por allá más atrás en el año pasado para ser más exacta, mi vida ha sido una porquería; una cosa aburrida, desabrida, deprimente y sin sentido, para profundizar un poco más en ese aspecto.
Pero ahora, mi apreciadísimo como inexistente público, ¿saben qué?; ahora que lo he terminado de digerir -porque las buenas noticias son difíciles de asimilar como las malas, no crean que no-, ahora por fin tengo la certeza de que mi vida de aquí en adelante va a ser mucho más divertida.

Y no lo digo porque me haya propuesto que así sea, ni porque he leído un libro de superación personal ni nada por el estilo... lo digo porque en este momento, así como los charlatanes (¿o algunos perceptivos?, mmm, nah) pronostican sucesos cuando se alinean los astros, así yo siento que en este momento se han alineado en mi vida sucesos buenos, ¡y excelentes!, sucesos motivadores, aburridos y simplones, regulares, relajaaantes, algunos un poco tristes y culposos, ... y...

...mejor dicho, para decirlo de una forma menos complicada:

que siento una bueeeeeeeeeena vibra, locos :)

domingo, febrero 03, 2008

Con las ciencias uno puede prever resultados con exactitud.

Con la lógica todo y es x y ningún x es z, luego ningún z es y.

Pero con la gente... todo es imprevisible.

Con la gente, por poner un ejemplo,
si mi mamá no puede soportar a mi papá y sería feliz si se atreviera a echarlo de la casa,
y mi papá un día por iniciativa propia se va de la casa,
lo lógico sería que mi mamá estuviera feliz
pero por alguna extraña razón no lo parece.

Y yo que me la paso estudiando para conseguir que las cosas funcionen, pero no funcionan.
O al menos para saber por dónde falló, y remediarlo... pero no hay CAD que me diga por qué carajos mi mamá está triste, ni tengo idea de cómo podría remediarlo.

En teoría todo parece tener sentido... pero la realidad es tan absurda.

miércoles, enero 02, 2008

como hablábamos el otro día, no hay nada más emocionante y mojador de cuco que me pueda imaginar, que el hecho de ver a mi querido proyecto, a mi hijo, sentado junto a todos sus hermanitos en un estante, a la venta. no sería un hecho que guashhhh cambiara al mundo, o al mercado, ni siquiera a mi... no habría aplausos, ni público, ni siquiera una mirada... incluso aún, probablemente el escenario sería bastante común y corriente, por no decir simplón, con gente que pasaría comprando lo de la competencia... pero aún así: qué mo-men-to.

yo sé que me estoy demorando; yo sé que no soy la mejor, o la más disciplinada, o la más creativa...

graduarse es un gran logro, ténganlo por seguro; pero lo que en verdad quiero y por lo que estoy trabajando, es por que mis "prototipos" dejen de ser esperpentos arrumados en mi estante y mis ideas esperpentos arrumados en mi cabezota, por que mi público deje de ser mi mamá que no entiende qué es pero le parece lindo... y ni siquiera me estoy refiriendo a éxito, fama o fortuna... simplemente a arrancar, a hacer lo que disfruto.


por eso este año no me pongo las metas ilusas que se abandonan en Febrero... sólo me doy alguito de ánimo y motivación para seguirle dando a las metas de siempre, que suenan taaan cool pero a veces parecen tan difíciles de continuar y resultan tan putamente decepcionantes... básicamente para continuar con esta vida que a veces parece tan la chimba y otras parece tan estúpida como tender la cama para igual volver a acostarse.



para todos mis lectores imaginarios (ahora más imaginarios que nunca jejjejeje)
feliz año.